Palacio de Dolmabahçe

Situado en la costa europea del Bósforo, el Palacio de Dolmabahçe es una de las edificaciones más grandes de Estambul. Construido entre 1842 y 1853, este edificio de estilo neobarraco y de corte occidental funcionó como centro administrativo del Imperio Otomano y supuso un contraste de modernidad para los Sultanes de la época, que decidieron cambiar el Palacio Topkapi por el Dolmabahçe como residencia oficial.

Formado por más de 250 habitaciones repartidas a lo largo de 45.000 metros, el Palacio es un ejemplo del lujo de la época, con una gran cantidad de lámparas de araña formadas por cristales de bohemia, así como alfombras de Hareke, y pieles de oso con más de 160 años regaladas al Sultán por los Zares de Rusia.

Si quieres visitar el Palacio, se encuentra fuera del Cuerno de Oro, algo alejado de la zona histórica,  en plena orilla del Bósforo en la costa europea. Si lo que buscas en tu viaje a Turquía es vivir el contraste oriental, quizás no te compense visitar el Palacio Dolmabahce, ya que su corte occidental no te sorprenderá tanto cómo la Mezquita Azul, Topkapi, o Santa Sofía. Sin embargo, si el estilo neobarroco está entre tus favoritos, no te lo pienses y haz una visita al Palacio. Nosotros recomendamos las visitas guiadas para evitar colas, ya que entrada la mañana suelen durar bastante tiempo y generan grupos de visitantes muy numerosos, ralentizando el recorrido y haciéndolo un poco tedioso.

Si solo quieres contemplar el exterior del edificio, creemos que es una buena opción aprovechar un paseo en barco a través de un crucero por el Bósforo para poder ver la fachada de Dolmabahçe. Y logicamente, también tienes la opción de visitar el palacio por tu cuenta, pero ya sabes, madruga para estar allí un poco antes de las 9:00 ya que es muy probable que tengas que soportar colas. Ya sabes, si tienes alguna duda respecto a esta visita, puedes contactar  con nosotros, estaremos encantados de ayudarte.